El alcalde de Nigrán, Alfredo Rodríguez Millares, decidió ayer por sorpresa retirar el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), que suscitó una violenta revuelta popular cuando lo quiso aprobar sin consenso el pasado mes de junio.

El regidor, del Partido Popular, ha decidido aparcar el polémico documento en un momento en el que la fiscalía está concluyendo una investigación para determinar si hubo algún tipo de delito de negociaciones prohibidas o de información privilegiada al amparo de su redacción.

Las sospechas se levantaron tras conocerse que el presidente del Celta y un directivo compraron terrenos que posteriormente aparecerían recalificados respecto a las normas subsidiarias que actualmente están en vigor. Las compras se realizaron en un momento en el que Alfredo Rodríguez compaginaba su cargo en la alcaldía con la dirección del club celeste y la tramitación del documento no era pública.

Investigación

El fiscal ha comenzado ya a llamar a declarar a funcionarios y concejales dentro de las pesquisas que está realizando desde el pasado verano y ha dejado ver en alguna ocasión que «puede haber algo».

La retirada del PXOM se abordará en un pleno extraordinario y urgente que ha sido convocado para mañana. El gobierno local, que siempre defendió el planeamiento en contra de todos los sectores y sólo aceptó introducir modificaciones, es consciente ahora de que genera «certa inquietude social e valoracións enfrentadas e dispares entre os veciños, colectivos sociais e partidos políticos».

El mandatario local asume que será la corporación que surja tras las elecciones de mayo del año que viene la que decida sobre la ordenación urbanística de Nigrán. Por lo tanto, el futuro gobierno municipal deberá considerar si reforma el actual documento para dar satisfacción a las demandas de las asociaciones vecinales o bien lo retira definitivamente y convoca un concurso público para contratar la redacción de un nuevo planeamiento.

El regidor señala también que «non teño máis interese no PXOM que os intereses xerais do pobo de Nigrán» y considera que un documento de tanta trascendencia para el futuro desarrollo del término municipal «non pode estar sometido a usos partidistas, intereses particulares, malinterpretacións, informacións sesgadas, falsas ou tendenciosas, senón a un clima de concordia e serenidade».

Mientras tanto, la situación urbanística de Nigrán continúa bloqueada.

La oposición cree que la decisión es una maniobra política

La oposición cree que la decisión del alcalde es una maniobra para ganar tiempo y volver a intentar aprobar el plan urbanístico más adelante, así como evitar la aprobación en el pleno ordinario del viernes de otra propuesta del BNG y del PSOE para lograr la retirada definitiva del documento. La propuesta de socialistas y nacionalistas incluye comenzar ya con las bases para la contratación de un nuevo plan y crear una comisión para que los colectivos aporten sus sugerencias. El BNG ya anunció que votará en contra de la urgencia del pleno del miércoles. Su celebración dependerá de la postura de los independientes, anteriores socios del PP, hoy en minoría.