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La Voz de Galicia

GALICIA


La Ribeira Sacra busca alternativas turísticas para paliar el vaciado del Sil


08/12/2009 | Luis Díaz


Las diputaciones de Lugo y Ourense negociarán con Iberdrola contrapartidas al parón de los catamaranes


La bajada de treinta metros en el nivel del embalse
afectará a los recorridos por el cañón del Sil

El calendario de las obras de ampliación del embalse de Santo Estevo, en el municipio ourensano de Nogueira de Ramuín, prevé una bajada de treinta metros en el nivel del Sil entre abril y octubre del próximo año. La Diputación de Lugo, que gestiona las rutas con base en Doade, da por sentado que en esas condiciones el funcionamiento de los catamaranes del cañón del Sil será inviable. Desde hace un par de semanas, un equipo de expertos busca alternativas para convertir en oportunidad lo que se presenta como un varapalo para la Ribeira Sacra en pleno Xacobeo. Iberdrola se ha ofrecido a colaborar con las instituciones y el sector turístico.

La vicepresidenta tercera de la Diputación de Lugo, y responsable del área de Turismo, María Xosé Vega, puso al corriente de los planes de la compañía a los empresarios del sector en una reunión celebrada en el Parador de Monforte el pasado 21 de noviembre. Entonces abogó por la colaboración entre las diferentes Administraciones para diseñar una estrategia de diversificación de la oferta turística de la Ribeira Sacra -ahora excesivamente centrada en el aprovechamiento de los catamaranes del cañón del Sil- que se llevaría a cabo con el apoyo de Iberdrola. La primera institución en recoger el guante ha sido la Diputación de Ourense, provincia desde la que opera la otra empresa que explota la ruta fluvial más solicitada en la Ribeira Sacra.

Impacto visual

Según señaló María Xosé Vega, las diputaciones de Lugo y Ourense, sabedoras de que «a unión fai a forza», han decidido actuar conjuntamente para encontrar alternativas que ofrecer a los visitantes cuando los catamaranes dejen de funcionar. Aunque Iberdrola ha sugerido que la navegación sería perfectamente factible en algunos tramos del embalse, en la Diputación lucense entienden que, al margen de los problemas de embarque que motivaría el desnivel del río, el espectáculo resultante del vaciado del Sil no sería el idóneo para atraer turistas.

Para tratar de avanzar en la búsqueda de contrapartidas, la comisión técnica que trabaja para la Diputación de Lugo se reunirá esta semana con representantes del sector vinícola y profesionales de la restauración de la zona de Doade, que es la que se verá más directamente afectada por la bajada del nivel de las aguas. «Entendemos que o mundo do viño estea preocupado e animámolo a acelerar iniciativas tan importantes como a Ruta do Viño», dice María Xosé Vega, que tiene previsto entrevistarse «en datas próximas» con responsables de Iberdrola para «abordar a situación e falar de diversas iniciativas».

Grupo de expertos

La puesta en marcha de una ruta enológica por la Ribeira Sacra es una de las muchas opciones que baraja la comisión de expertos a la que ha recurrido la Diputación de Lugo y de la que forman parte el biólogo Pablo Ramil, el especialista en paisajismo Augusto Pérez Alberti, la economista Ana Isabel García Arias y el jurista Apolinar Gómez Roca, todos ellos vinculados a la Universidade de Santiago. De acuerdo con las cifras de la Diputación de Lugo, el catamarán del cañón del Sil, cuyo funcionamiento se amplió recientemente a los meses de otoño e invierno, moverá este año en torno a los 30.000 visitantes solo en el embarcadero de Lugo.




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