Los abucheos y gritos son una constante en los plenos de Gondomar desde la moción de censura. La de ayer, pese a que daba comienzo a las 13.30 horas, no fue excepción. Más de un centenar de vecinos acudieron al auditorio Lois Tobío con las pancartas ya famosas de "moción=corrupción". Los manifestantes hicieron pasillo a los miembros del tripartito a su llegada y salida del recinto sin que se produjese ningún incidente. En plena sesión el audímetro se disparó cuando volvieron a nombrar a los ediles expulsados como miembros del PSOE en la corporación.
El regidor local, Martín Urgal, tuvo que llamar al orden al púbico congregado en varias ocasiones y recordó que no estaban autorizados para intervenir. A los gritos de "corruptos o "ilegales" el alcalde amenazó con "identificar a los que están insultando y pedirles que abandonen la sala". Finalmente, no fue preciso.
La retirada del orden del día de la propuesta de Alcaldía en la que se advertía de la necesidad de que Alfonso de Lis, Manuel Gómez, Carlos Cabaleiro y Teresa Pereira pasaran a ser del grupo de los no adscritos, sirvió al portavoz del BNG, Pauliño del Río, para enumerar las "continuas modificaciones" que se tienen que realizar en la formación de las comisiones debido a "obviar el informe de la secretaria municipal" y a "errores en su aprobación".
Y es que, en la transcripción se había registrado una "confusión y baile" entre la titularidad de vocalía y suplencia de los concejales Ignacio Salgueiro y José Antonio Rodríguez. Sin embargo, el BNG advirtió de que la propuesta de alcaldía de corrección presentaba un nuevo error, ya que no existía concordancia entre el número de miembros (8) de la comisión informativa y la relación nominal de los mismos (9). La secretaria municipal indicó que la composición de la corporación debería "corregir la corrección" en el próximo pleno.
En la sesión extraordinaria fueron aprobados por unanimidad las propuestas realizadas por el ex alcalde, Antonio Araúxo, por un lado, sobre las facturas pendientes de pago por la finalización de la guardería por un valor de 26.673 euros y, por otra parte, la solicitud de una préstamo de más de 240.000 euros a la Diputación de Pontevedra para la construcción del paseo fluvial por el río Miñor entre Gondomar y A Xunqueira.
Los nacionalistas denuncian que en el pleno no se trataron los asuntos prometidos por tripartito como son la piscina municipal y las obras del Plan E. Criticaron, además, la hora en la que se había convocado el pleno "para impedir que a xente fose". El portavoz del gobierno, Núñez Sestelo, explicó que minutos antes se había inaugurado una exposición a la que debían acudir concejales.
 |
 |
 |