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La Voz de Galicia

GALICIA


La lluvia afea la marcha contra el futuro parque eólico de Domaio


06/02/2012 | L. C. Saavedra
| MOAÑA
   

Cientos de personas tuvieron que acortar la ruta prevista por el mal tiempo

Las precipitaciones caídas durante la mañana de ayer deslucieron en gran parte la caminata de protesta organizada por la Plataforma en Defensa dos Montes do Morrazo contra la futura instalación de un parque eólico en las cumbres de Domaio, cuya construcción se prevé a medio plazo en un punto elevado en unos 600 metros sobre el nivel del mar y en una zona que colinda con los concellos de Marín, Moaña y de Vilaboa. La lluvia ahogó así en cierto modo la cifra final de personas que, en principio, estaban dispuestas a secundar la protesta ciudadana, que finalmente fue de casi 300, según fuentes de los organizadores y de algunos participantes, aunque la previsión inicial era de al menos casi medio millar.

Debido a las inclemencias del tiempo, los participantes tuvieron que acortar sustancialmente el recorrido, que, en principio, era de siete kilómetros, y variar también el plan de la comida de confraternidad tal y como estaba proyectada en su momento. El paulatino e inexorable avance de la lluvia y de la espesura de la niebla en la zona hizo inviable proseguir con la hoja de ruta trazada desde la falda del monte. De hecho, algunos de los participantes no iban suficientemente provistos de ropa de lluvia y abandonaron en cuanto la meteorología adversa dio sus primeros avisos. Si la razón declaraba abiertamente a todos que debían batirse en retirada, su espíritu de protesta no fue en vano, ya que quedó patente su intención de pelear por un espacio natural que pretende ser en el futuro rehén de un proyecto industrial.

Pedras Negras

En efecto, el parque eólico de Pedras Negras está incluido dentro del plan gallego diseñado por la Xunta de Galicia y prevé la instalación de 14 aerogeneradores, con la ocupación de una explanada de 17 metros cuadrados cada uno, la apertura de nuevos viales y el ancheado de otros que suman 17.302 metros lineales, así como 15.702 metros para la instalación de cableado eléctrico y comunicaciones y una subestación eléctrica. El parque eólico, según la plataforma, parte de una zona de estudio con una superficie de 4.300 hectáreas, que recoge la totalidad del espacio natural protegido de los Montes de O Morrazo, además de parte del Carballal de Coiro, «os dous espazos naturais protexidos terrestres máis importantes de toda a comarca».

El polígono contaría, siempre según la citada plataforma, cuenta con la autorización de la Xunta de Galicia y como promotor a la firma Enel Green Power España S.L, con matriz italiana. Según la idea original, se construirán 14 molinos de vientos de hasta 119 metros de altura y unas palas con 112 de diámetro.

Repercusiones

La instalación del parque eólico, afectaría, según la Plataforma en Defensa dos Montes do Morrazo, «ás áreas naturais de monte Formigoso, Chan de Arquiña, Chan de Gagán, Chan de Xestoso, Serra Domego, Chan da Carqueixa, Chan de Pedras Negras, Os Candóns, Chan de Goa, Serra Basil e Outeiro da Charamiza, entre os 450 metros e os 600 metros de altitude, situados na zona máis alta da península do Morrazo, e preto dos altos de Monte Faro de Domaio e Coto do Home, integrado plenamente no espazo natural dos Montes do Morrazo, protexido como solo rústico de protección de espazos naturais polas normas subsidiarias de planeamento de Pontevedra».

También repercutiría en el área de protección de varios yacimientos arqueológicos, principalmente mámoas megalíticas existentes entre las zonas de Chan de Armada y la propia de Chan de Arquiña, además del área de protección de un petroglifo de la Edad de Bronce, «o de Outeiro do Gorgullo no monte Formigoso».



Las panorámicas de la Rías Baixas

Según la organización de la protesta, la instalación del parque eólico, afectaría a las amplias vistas panorámicas de las Rías Baixas entre la ría de Vigo y la de Pontevedra y muy cerca de la ensenada de San Simón, espacio natural integrado dentro de la Red Natura. El impacto se sumaría al de otros proyectos de parques eólicos en las sierras da Groba e do Galiñeiro, en frente de la ría de Vigo y en el monte Castrove, de la de Pontevedra, incluidos, asimismo, en el citado plan eólico galego. La afectación también se ampliaría a una zona de importancia geológica conformando un paisaje exclusivo de sucesión de relevos graníticos en altura con abundancia de rocas de distintas morfologías moldeadas por los agentes naturales desde tiempos remotos. Finalmente, repercutiría en los nacemientos de los ríos Loira, Fraga, Miñouba y Riomaior, estos dos últimos con su desembocadura en la ensenada de San Simón.




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